A Plague Tale: Requiem: Hemos jugado un capítulo completo de la secuela de Asobo en la Gamescom

No se puede negar que la Gamescom de este año ha sufrido la falta de algunos de los grandes al haber decidido mantenerse apartadas de la convención compañías como Activision, Take-Two Interactive, Sony o Nintendo. Pero que estas compañías decidiesen no acudir no quiere decir que no hiciesen aparición algunos juegos increíblemente emocionantes, entre ellos A Plague Tale: Requiem

Debo confesar que no era un gran fan de la serie hasta que por fin me decidí a jugar a A Plague Tale: Innocence hace unos meses. No hace falta decir que me quedé con muchas ganas de probar Requiem. Probablemente por eso la decepción no era una opción en esta demo en la que Asobo Studio me permitió jugar al sexto episodio del juego completo. Aunque diré que el juego es algo distinto que el primero (por lo general para mejor), no me ha decepcionado en absoluto. Dejad que os cuente por qué.

En primer lugar, como cabe esperar de un juego que (a diferencia de su predecesor) está diseñado únicamente para PC y consolas de la generación actual dejando a un lado a PS4 y Xbox One, hay un montón de mejoras tecnológicas que realmente elevan a A Plague Tale: Requiem. Desde niveles más largos que les ponen las cosas más complicadas a Amicia y Hugo al tener que escabullirse de enemigos más desafiantes, a una mejor iluminación, una mejor resolución y todos los trucos y herramientas que hacen que el juego sea visualmente sorprendente. Las mejoras tecnológicas se hacen notar instantáneamente, ya sea por las animaciones faciales o al caminar a través de un exuberante campo de lilas o de lavanda. Es una mejora significativa en la calidad que se aprecia mejor en una comparación única de las ratas en A Plague Tale.

Tras mi sesión de juego, pude hablar con el director del juego, Kevin Choteau, como parte de una entrevista que ya podéis ver en Gamereactor (echad un ojo más arriba). Choteau me contó que la mejor tecnología del motor de Requiem permite que el juego renderice hasta 300.000 ratas a la vez en comparación con el máximo de 5.000 que seguía haciendo que las hordas de viles roedores de Innocence pareciesen inmensamente grandes. No hace falta decir que habrá montones de ratas de nuevo. Muchas más de las que jamás podrás percibir.

Pero volvamos a la dinámica del juego y a cómo ha cambiado en esta secuela. Como ya nos han contado en varios tráilers y vídeos de gameplay, en este juego Amicia y Hugo son algo mayores. Amicia ya no es una protectora pasiva que pasa a hurtadillas tras sus enemigos y corre para evadir el peligro. No, ahora va armada con una ballesta que le permite plantarles cara a sus enemigos. La economía de munición no le permitirá dispararle a cualquier malhechor que se cruce en su camino, pero podrá deshacerse de sus enemigos con mayor facilidad, lo que parece ser la razón de que los dos hermanos se encuentren de nuevo en otra situación complicada y desagradable. Amicia también tiene algunas sofisticadas herramientas nuevas a su disposición, como alquitrán que permite extender las llamas, y el sistema de fabricación se ha simplificado un poco, así que es fácil ver que armas está usando Amicia y la munición equipada en cada momento.

Hugo también tiene algunos poderes nuevos con las ratas, habilidades que le permiten controlar hordas y guiarlas para atacar a los enemigos con precisión directa, o detectar por dónde están los enemigos (piensa en un sónar de ratas). Todo esto crea nuevas formas de afrontar cada nivel, que como ya he mencionado, son más largos y requerirán más paciencia y planificación para conseguir superarlos sin ser detectados ya acabar viéndonos sobrepasados por demasiados enemigos.

En general, esta ha sido la temática de la demo. A Plague Tale: Requiem es más grande, más bonito y está claramente desarrollado con un presupuesto mucho mayor. No cabe ninguna duda al respecto. Este juego está destinado a ser uno de los mejores juegos de todo el año y, si el resto de la historia mantiene la misma calidad que exuda este capítulo en concreto, tal vez Asobo tenga un candidato a juego del año en sus manos. No hace falta decir que estoy muy emocionado con él y que estoy deseando que llegue el 18 de octubre.