Hay una moda a la que no nos importa sumarnos. Parece que estamos dejando atrás esos headsets de gaming que parecen sacados de programas de lucha como American Gladiators (y con un cierto aire a las últimas de Transformers, así para rematar). Marcas como HyperX, Cooler Master, Razer y ahora Roccat apuestan por un enfoque minimalista, lo cual es de agradecer. Olvídate del frenético parpadeo de las luces LED en un sinfín de colores RGB personalizables. Nada de ver cómo el logo, por lo general de tono oscuro, se ilumina de verde lima. Y atrás quedaron las almohadillas con diseño hexagonal en un intento de dar un toque "futurista". Más bien, los Noz nos recuerdan a aquellos auriculares 'hi-fi' de finales de los 70. Negros, nada ostentosos y de tamaño justo. Y, visto lo fácil que resulta desacoplar el micrófono, te valen tanto para jugar como para escuchar música. Porque no hay duda de que cumplen en lo que a sonido se refiere.
Lo primero en lo que nos fijamos, además del diseño limpio, es lo sorprendentemente ligeros que resultan los Noz como headset. 210 gramos. Como una bolsa de caramelos, para que te hagas una idea. Una vez sobre la cabeza, el peso se distribuye de manera equilibrada hasta tal punto que apenas notarás que los tienes puestos. Los controladores miden 50 mm y las almohadillas, algo más pequeñas de lo habitual, se ajustan cómodamente, con un interior recubierto por un tejido suave. La forma de los auriculares se adapta bien, y os lo dice alguien que tiene un bloque de granito por cabeza. Tras pasarnos 4 o 5 días metiéndoles caña, no hemos sentido la más ligera molestia en las orejas o la sien.
Sobre la oreja izquierda encontramos una rueda para ajustar el volumen y un botón para silenciar el micrófono, algo que se antoja muy útil cuando mordemos el polvo en Apex Legends y necesitamos decirles cuatro cosas a nuestros contendientes. En general, la funcionalidad y, sobre todo, la calidad del diseño de este headset son una grata sorpresa. Tras no darle un respiro durante una semana, hemos comprobado que ni el confort ni la calidad del sonido se han resentido lo más mínimo.
Quizás, para nosotros, que preferimos un sonido grave, el paisaje sonoro de los Noz resulta demasiado suave, ya que solemos tirar por auriculares con un sonido más cálido y bajos más profundos (como los de Audeze, por ejemplo). En ocasiones, los agudos se oyen algo forzados, y si escuchamos algo en vivo puede parecernos que el sonido está como enlatado. Con todo, este headset es muy decente para escuchar música, sobre todo por el precio que tiene. Ahora bien, rinde mucho mejor cuando se trata de juegos. El paisaje sonoro que produce da más de sí cuando jugamos, y hemos observado que Roccat ha optado por un sonido estéreo potente y dinámico, en lugar del sistema 'virtual surround' al que suelen recurrir la mayoría de fabricantes hoy en día.
¿Y qué hay del micrófono? Su calidad es bastante aceptable y, aunque no es de lo mejor que hemos probado en Gamereactor, diríamos que por el precio del headset, bien podríamos estar hablando de toda una ganga dentro de su categoría. Si buscas un conjunto de cascos con micro de calidad, elegante, ligero y sencillo, que además hace las veces de auriculares para música, solo nos queda recomendarte los Roccat Noz encarecidamente.