Análisis del ratón Razer Viper Ultimate

La primera vez que probamos el ratón Logitech G Pro Wireless y comprendimos todas sus virtudes nos quedamos pensando cómo sería posible superar un producto así. Han pasado varios años y ningún fabricante ha sido capaz de hacer sombra a ese modelo y al G502 Lightspeed en cuanto a la serie gaming, aunque es cierto que para algo tan personal, los gustos influyen. Así que ya sabemos a quién tenía en mente derrocar el equipo de diseño de Razer mientras creaba el Viper Ultimate.

El ratón inalámbrico Razer Viper Ultimate pesa solo 74 gramos, una marca mínima que han conseguido utilizando una técnica que llaman de panal, pues consiste en diseñar la carcasa completa y después cortar pequeños agujeros de la estructura para aligerarlo. Es ambidiestro, por lo que ofrece dos botones en cada lateral, acomodados en torno a una goma que proporciona sujeción. Por arriba, a la vista, una capa negro mate ambientada por una luz LED. El único tono de color RGB de todo el aparato está en su logo.

El bloque transmite una sensación muy robusta en la mano, como si no hubiera que haber sacrificado nada de densidad de su chasis para alcanzar ese peso. La rueda también es recia y no baile al utilizarla, ni tampoco hay incomodidad a la hora de presionarla hacia adentro para encontrar su clic. Es decir, que estamos ante un ratón la mitad de pesado que sus rivales, pero que es tanto o más bueno en construcción general.

Viene con el dongle HyperSpeed de conexión USB, oculto bajo en su interior tras una pequeña tapa de plástico. Aunque es cierto que así ya podemos llevarlo a donde sea bien resguardado en su interior, y sin miedo a que se caiga o se pierda y no lo veamos más, nos gusta más la solución magnética de Logitech. Dicho esto, seguimos encantados con el rendimiento inalámbrico de la tecnología HyperSpeed, que consigue que el ratón se comporte con la misma velocidad de respuesta y fiabilidad que sus equivalentes con cable.

El puerto micro-USB ha sido diseñado para que también se pueda utilizar con cable, pero la forma básica de cargar el ratón Viper Ultimate es mediante su base de acompañamiento. Este cargador es un pequeño soporte con forma de podium que ofrece carga magnética a través de sus dos conectores de 5 voltios que le da mucho empaque y elegancia. Es cómodo dejarlo ahí y volver al día siguiente a utilizarlo repleto de energía. Quien prefiera el cable, pues también es una buena opción pues utiliza la tecnología SpeedFlex, más suave y con menos tendencia a friccionar contra la mesa.

De todos modos, la carga no es el mayor problema de este producto. Mientras que su rival suele darte una vida de 48 horas por carga haciendo un uso variado y sin utilizar el RGB, Razer ha logrado rozar los tres días sin conectarse. Los números oficiales hablan de 70 horas y nosotros hemos llegado a sacarle 68 horas, así que estamos satisfechos de su eficiencia.

En cuanto a su lectura de movimientos y pulsaciones, es un ratón de clic óptico que, según Razer, es tres veces más rápido que los mecánicos. Es difícil de cuantificar sin herramientas de precisión, pero sí podemos valorar que la sensación táctil y la resistencia del botón son excelentes. Por otro lado, estrena el sensor Razer Focus+, que alcanzan el nivel de DPI más alto del mercado, 20.000 puntos por pulgada. Sinceramente, nos parece toda una exageración esa sensibilidad tan alta. Por especificaciones, también alcanza las 650 IPS o pulgadas por segundo, que es la velocidad máxima a la que puedes moverlo antes de que pierda el norte. Esto nos gusta más, porque hemos probado a hacer varios gestos bruscos y siempre acaba donde se le espera, algo ideal para una partida intensa.

Por supuesto, a este modelo no faltan opciones de configuración por software. En este caso volvemos a trabajar con Synapse, una app de las que más nos gustan de los fabricantes de periféricos gaming. Permite tocar y calibrar multitud de elementos, pero todo de forma muy directa y presentada para que los usuarios menos experimentados sepan lo que están haciendo y qué resultado va a dar aproximadamente.

Una calidad que no sale barata. El ratón inalámbrico Razer Viper Ultimate es caro, pero como ha llegado para posicionarse en el número uno de la lista, también se puede decir que es el peaje para tener lo mejor. Logitech tiene un problema, y es que cada vez hay más ratones que están a su altura e incluso empiezan a superar a los suyos que tanto tiempo han dominado el segmento.