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Blades of Time

Análisis de Blades of Time

¿Has oído alguna vez esa sobre el dragón, el cazatesoros y la nave espacial?

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Vaya, lo sentimos por esa introducción, no es así exactamente, pero es que Blades of Time intenta mezclar tantos elementos y tendencias en su historia que esperarías que apareciera la nave en cualquier momento.

El sucesor espiritual de X-Blades (mismo desarrollador, distinta editora) se llama Blades of Time y tiene los suficientes re-ajustes como para no parecer una continuación directa. Ya no están los gráficos cel-shaded, las 'gun blades' o las destrezas buenas y malas. Ahora, Ayumi, la heroína del juego, es simplemente una mezcla típica de polígonos que maneja sus armas de fuego o blancas independientemente. Sin embargo, sigue siendo una protagonista ligerita de ropa (interprétalo como quieras).

El juego no pierde ni un minuto para poner a Ayumi en situación, comenzando con una torpe escena CG que la coloca rápidamente en la mística Tierra del Dragón. Una vez se ha aclimatado a esta nueva dimensión con la frase "podría estar en el infierno... bueno, ¿quién sabe?", tiene dos cosas en mente: el tesoro y a su colega Zero. Obviamente, estos dos asuntos serán los más tratados en el resto de su repertorio de frases oportunas.

La historia puede parecer una excusa endeble para que los diseñadores de niveles pudieran crear cualquier cosa que les viniera a la cabeza: junglas, desiertos, templos... todos aparecen a causa del clásico tópico de este tipo de argumentos: un portal. Aun así, parece que esa línea argumental suele olvidarse de las motivaciones de Ayumi, pasando de buscar el tesoro a encontrar a su compañero según venga mejor el uno o el otro.

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Blades of Time

Ayumi, junto a la mayoría del reparto, ha desarrollado un acento británico bastante estrafalario. Esto, unido a diversos giros del guión poco racionales y a la colección de frases poco acertadas son factores que tiran por tierra completamente la tarea narrativa.

Por lo tanto, queda en manos de la jugabilidad salvar el conjunto. Aquí, el estudio Gaijin Entertainment aplica la misma táctica que con la historia: pon todo lo que se te ocurra y no pares hasta los créditos finales.

Por lo tanto, aunque el juego comienza con un poco de 'hacking' sencillito y algo de 'slashing' bastante agradable, según vas progresando por los primeros niveles aparecen las nuevas armas, combos mágicos y, lo más importante, habilidades para saltar en el tiempo. Si has jugado a cualquier juego en el que se peguen espadazos con pulsar el botón, te sentirás como en casa.

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Pese a que el combate principal se inclina peligrosamente hacia el aporreo de botones, sin dejar mucho espacio a la estrategia, esas otras incorporaciones a tu arsenal ayudan a crear diversas formas de aderezar las peleas con ideas atractivas. También pueden dificultar el flujo del combate de la misma forma que el propio juego se complica la vida en su desarrollo.

Como el juego te recuerda constantemente, puedes rebobinar el tiempo para crear una versión 'pasada' de ti mismo. De forma similar a Echochrome, las acciones que desempeñas pueden entonces re-jugarse en el presente. En la práctica, puedes crear fuego de cobertura para ti mismo y entonces rebobinar el tiempo para poder enfrentarte a los enemigos. Es una mecánica que funciona sorprendentemente bien: cuando el juego te deja imaginar estrategias como esta, todos sus fallos aparentes comienzan a perder relevancia.

Blades of Time

Los combos mágicos, que se van mejorando poco a poco durante el juego, ofrecen una experiencia visual interesante en comparación con las típicas animaciones que ves una y otra vez. Por el contrario, el combate con armas de fuego es pesado y contra-intuitivo. Por ejemplo, no puedes realizar un movimiento de esquive o pasar a cuerpo a cuerpo cuando estás apuntando con un arma.

Tampoco se pueden excusar de ninguna manera ciertas batallas contra jefes, realmente chapuceras, o una cámara que tiene la manía de pasar de la acción. Cuando estás en el tramo final, puede sacarte de quicio que la cámara dé vueltas y esconda a los vagabundos que intentan cortarte en cachitos.

Los niveles en sí son relativamente granes y, como decíamos, los diseñados han intentado quedarse a gusto a nivel de variedad. Es la única razón que se nos ocurre para que pases de un templo a un desierto abrasador. En cierto punto, debes navegar a través de las sombras para no quemarte hasta morir. Tiene cierto olorcillo a aquel nivel de Gears of War 2, pero el toque tontorrón lo separa de la copia descarada.

Pese a la noble determinación que hay detrás del diseño, los verdaderos valores de producción son capaces de estropear el resultado de los niveles. Los gráficos son funcionales, pero incapaces de acercarse al listón de God of War. La música apenas se percibe entre las terribles actuaciones vocales. Por si fuera poco, los bajones en el refresco de la imagen también aparecen cuando los enemigos comienzan a amontonarse.

Blades of Time

Si te encanta el sistema de combate, también existe una modalidad de juego en línea, diseñada para cooperar o competir. Por desgracia, me costó mucho llegar a jugar con alguien, pero cuando por fin conseguí conectarme supuso una buena extensión del juego en solitario. Aun así, nada que vaya a atrapar a las masas.

Durante una partida a Blades of Time te viene a la cabeza en varias ocasiones el tema de la ambición. El juego intenta, admirablemente, que hagas mucho más de lo que realmente puede ofrecerte. La historia va acumulando los giros hasta que parece una serie de TV, la jugabilidad nunca deja de aportar nuevos trucos y situaciones únicas para mantenerte implicado con el combate y sólo el hecho de incluir multijugador es sorprendente.

Ese es el problema: con toda esa ambición, es normal que el juego se derrumbe como un castillo de naipes en muchas ocasiones. Simplemente, no puede soportar el peso de sus elevados objetivos. Contemplar cómo intenta reinventarse y hacer todo lo posible para impresionarte una y otra vez al menos es una tarea tan curiosa como intentar montar un castillo con cartas.

05 Gamereactor España
5 / 10
+
Fascinante sistema de combate, niveles enormemente variados, algunas frases desternillantes.
-
La ejecución no está a la altura de la ambición, a la historia le falta cohesión, los 'voiceovers' son terribles.
overall score
Media Gamereactor. ¿Qué nota le pones tú? La nota de la network es la media de las reviews de varios países

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ANÁLISIS. Autor: Ben Tyrer

"Gaijin Entertainment aplica la misma táctica que con la historia: pon todo lo que se te ocurra y no pares hasta los créditos finales."



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