| No Rest for the WickedLIVE
HQ
| No Rest for the Wicked
Chat
X
Una gira intergaláctica para apoyar a uno de los mejores guitarristas del universo que se acaba convirtiendo en todo un viaje de autodescubrimiento. Con una presentación así, queda claro que en The Artful Escape la música lo es todo, y Beethoven & Dinosaur lo demuestra a cada paso que das. No será el más sorprendente en mecánicas, pero suena que da gusto. Su brillante banda sonora está repleta de soberbias melodías que dejan huella en su mundo cada vez que coges la guitarra. Suma a eso unos conciertos que son un puro deleite audiovisual y tienes aquí nuestro último premiado. Perfecto para melómanos.
Nos contaba Dinga Bakaba, director en Arkane Lyon, lo difícil que era contar historias o desarrollar mecánicas cuando tu partida es el día de la marmota. Sin embargo, como también ocurre con Returnal, el sonido juega una parte esencial a la hora de 'soportar' el bucle y sentirte que avanzas dentro de él, y aquí el trabajo de Michel Trémouiller no solo hace eso, sino que también transmite la originalidad del mundo y su estilo cómic y setentero. Prueba a 'mutear' Deathloop y verás cómo pierde la mitad de su personalidad, por mucho que la parte gráfica sea la más llamativa. Un trabajo único este año.
"MercurySteam does what Nintendon't". De sobra es conocido el rechazo de Nintendo a los estándares más cinematográficos. Los amantes del cine en casa se las tenían que apañar con los juegos que admitían Dolby Pro Logic II en Gamecube y Wii a falta de una salida óptica con Dolby Digital, mientras que con la llegada del HDMI a sus sucesoras han sido contados los estudios que lanzaban sonido LPCM envolvente a falta de Dolby o DTS licenciados. La propia Nintendo no lo propicia, y cuando usan el sonido surround se limitan a lo básico, sin explotarlo con separación de canales u objetos. Por esto, el estudio español merece nuestros elogios. No entendemos mucho la ubicación de algunas voces o la ausencia de más efectos a las espaldas, pero la separación y claridad son loables y consiguen mejorar la atmósfera jugando en el salón, que es de lo que se trata.
Pero solo por aprovechar la tecnología no habría hueco para Metroid Dread en este top. Más importante aún, ya sea en estéreo, en envolvente o con auriculares, es el diseño de audio y la música ambiental. Las notas de siempre de Kenji Yamamoto se combinan con los sonidos del planeta ZDR como solo recordábamos de la trilogía Metroid Prime, así que nuestro aplauso para Emilio Gutiérrez López, Pablo Balaguer de Diego, Ignacio Blázquez Roelas o David Bolaños Gallardo es doble.
Sobrevivir a los ciclos de Returnal puede ser una auténtica pesadilla, pero no nos podéis negar que la tensión se masca más que nunca gracias a un apartado de sonido totalmente trabajado. Pocos juegos logran sumergirte tanto en un planeta desconocido como lo hace el juego de Housemarque Studios gracias a su magistral manejo del sentido del oído.
Oscuro, perturbador e inquietante. Te sientes dentro de Atropos desde el primer momento por su genial trabajo con el sonido espacial, como también por la total fusión del entorno con los sonidos que emite el DualSense. Es un estímulo constante que te hace sentir verdaderamente en la piel de Selene, aunque es una pena que no llegue a sacar partido a la tecnología Dolby Atmos. La experiencia de Returnal logra ser tan impactante por cómo entra por los ojos, pero sobre todo por los oídos, por eso merece estar en esta posición.
Si tenéis un buen sistema de sonido en casa, dadle una oportunidad al juego de Housemarque. Tras la brutal primera impresión inicial, recordaréis nuestras palabras.
El empeño de Playground Games por conseguir una ambientación sonora de primera viene de lejos. En Forza Horizon 4 rozaron el sobresaliente, pero siempre faltaban algunos ajustes para alcanzar la excelencia.
El trabajo del equipo inglés con FH5 significa el mejor paisaje sonoro del año, con un sonido aún más limpio, un trabajo posicional de primera (ojo cuando entras en un túnel si tienes altavoces de altura) y una tecnología puntera. Entregar la mezcla en Dolby Atmos da para sacarle jugo a los mejores sistemas de cine en casa, con una calidad a la altura de los Call of Duty y compañía. Pero es que lo de emplear el ray tracing para calcular los rebotes es ya una sobrada. No sabemos siquiera cuánto o lo bien que funciona, o si es pura palabrería, pero el caso es que el trabajo ambiental, sumado a los mejores sonidos y ruidos de entorno y motores, conforman un conjunto impresionante.
Notar cómo te sobrevuela un avión, cuándo se te acercan los rivales o cómo un trueno sobrecogedor da paso a la lluvia al tiempo que oyes los temazos del festival a lo lejos no tiene mucho parangón. Te guste más o menos la selección musical de las cadenas de radio de esta entrega.
