Nuclear Throne - impresiones

Parece que de cada tres o cuatro juegos lanzados últimamente, al menos uno es uno del estilo 'roguelike' con generación procedimental, y que casi todos los juegos independientes para PC se están animando a pasar por el proceso de Acceso Anticipado en Steam. Hay una plétora de opciones si te interesan los 'roguelikes' aún por terminar para ordenador. A nosotros nos encantan, lo que explica por qué tenemos tantos en nuestra cuenta de Steam a la espera de unas buenas partidas y las consecuentes impresiones. Como estas.

El indie-roguelike-a-medio-hacer que hemos estado jugando en los últimos días es Nuclear Throne, el último trabajo de Vlambeer, que ya se puede comprar incompleto por sólo 12 euritos. Comenzó llamándose Wasteland Kings, con su primer prototipo creado en sólo tres días durante el evento de creatividad Mojam del pasado febrero. Ha llegado muy lejos desde entonces, incluyendo un cambio de nombre tras las comparaciones entre el título original y cierto RPG post-apocalíptico e isométrico en desarrollo en Inxile Entertainment.

Otro de los aspectos destacables de Nuclear Throne es que su desarrollo ha sido hasta ahora una experiencia realmente abierta para el estudio y los jugadores que lo están probando. Cada martes y jueves, el equipo emite un programa vía Twitch.tv durante el que descubre cómo va el proyecto, algo que ha captado un seguimiento considerable.

Pero eso es una atracción secundaria y nos estamos distrayendo. Estamos aquí para hablar del juego, para compartir una breve percepción sobre cómo está quedando este 'roguelike' orientado claramente a la acción. Emerge de entre un grupo de juegos que proponen algo bastante similar; perma-muerte, niveles generados proceduralmente y gameplay frenético. Entonces, ¿hay algo que separe a Nuclear Throne de sus semejantes y baste para recomendar su compra considerando que ni siquiera está terminado aún?

Lo primero que nos impresionó fue su banda sonora. En pocas palabras, es de primera clase. Las guitarras rasguean gradualmente bajo la psicodelia y los inquietantes ganchos, antes de romper en algo más sustancial. Así consigue generar el ambiente apropiado en un periquete.

Tras la primera impresión positiva que entra por los oídos, nos presentan el plantel de personajes mutantes, cada uno con sus propios poderes especiales que cambian por completo la forma de afrontar cada partida. De esta decisión de diseño saldrá gran parte de la rejugabilidad de Nuclear Storm. Debes elegir a tu personaje y juntos asumir una brutal misión hasta llegar al final del juego y alcanzar el trono que le da título. Creemos. Todavía no hemos llegado tan lejos. Ni nos hemos acercado. De hecho, el trono puede que ni siquiera esté aún en el juego, por lo que podemos decir.

Personajes como Fish y Crystal ofrecen a los principiantes una introducción más amable a la brutalidad del páramo post-apocalíptico del juego. Crystal puede hacerse invulnerable ante ciertos ataques durante un tiempo, mientras que Fish ejecuta una útil voltereta para esquivar el daño. Cada uno de los personajes disponibles -por el momento son diez- cuenta con su habilidad y con una ventaja de inicio diferente. Aparte de rodar, Fish también recibe más munición de las cajas saqueadas por los niveles.

No os voy a contar demasiado sobre los personajes aquí, porque gran parte de la diversión de Nuclear Throne viene de explorar y experimentar con los distintos poderes especiales, descubriendo los que mejor se adaptan a tu estilo de juego, o nuevas formas de enfocar cada partida, afrontando las mismas situaciones con tácticas diferentes.

Conforme te vas abriendo camino a tiros por los niveles, vas recogiendo el XP irradiado, lo que sirve para subir de nivel e incorporar nuevas habilidades entre cada fase. El límite de nivel no está demasiado alto por ahora, pero según avanzas por el juego podrás añadir más poderes especiales -o mutaciones- para seguir mejorando tu efectividad a la hora de coser a balazos a escorpiones gigantes, enormes larvas, ratas y otros enemigos igual de grotescos.

La tarea a realizar en cada nivel es realmente simple: tienes que matar a todo lo que se mueva, lo que significa que no puedes ser demasiado conservador en tu estrategia. La agresividad es una necesidad. Eliminar al último enemigo abre un portal que te absorbe y te lleva al siguiente en cuanto te acercas, por lo que coger todo el equipo que haga falta por el camino resulta esencial. Una vez cerrado, se acabó y toca un nuevo nivel, estés listo o no.

Por lo tanto es un planteamiento bastante sencillo, pero la variedad en el sistema de juego es lo que realmente nos ha cautivado. No en cuanto a los primeros niveles o los enemigos que te cruzarás, sino más bien por las diferencias que experimentarás gracias a las diversas habilidades de los personajes. Eso y la brillante banda sonora.

La sutileza y los matices de las habilidades no tendrían tanto valor si el juego no se controlara bien, pero el combate es satisfactorio y está bien compensado. Jugamos tanto con ratón y teclado como con mando tradicional, y la experiencia fue igual de buena (algo genial teniendo en cuenta que el juego saldrá en PS4 y PS Vita más adelante). De hecho, probablemente nos quedemos con el mando, porque permite recostarte y relajarte mientras te dejas llevar, en lugar de encorvarte sobre el teclado como suele ser la norma con los 'roguelikes' sin terminar en PC.

Hasta el momento, por mucho que el juego sea solo un trabajo a medias, es muy fácil de recomendar para los fans del género. La gran transparencia de Vlambeer (mediante el livestreaming de su desarrollo) lo convierte en una experiencia esencial para los interesados en el diseño de videojuegos. Para los demás, a los que simplemente os encanta disparar sin parar en los 'roguelikes', también merece un vistazo. Ya está lo bastante pulido como para que no parezca demasiado verde, y llegan actualizaciones de forma regular. La última, Update #12, introdujo un nuevo personaje jugable llamado Rebel (que puede generar aliados a cambio de unos cuantos PS), el marco de trabajo básico para el sistema de desbloqueo de personajes, nuevos sonidos y armas basadas en llamas.

Pese al gran acabado ya presente y las nuevas funciones que están incorporando, y pese a los elogios que tanto nosotros como otros estamos vertiendo sobre el juego, algunos prefieren esperar al artículo terminado antes de rascarse el bolsillo. Si esa es tu postura respecto al Acceso Anticipado de Steam, te recomendamos que le sigas la pista a este Nuclear Throne, y que vengas a leer nuestro análisis en cuanto el juego esté terminado. Según lo que hemos visto hasta ahora, ya te adelantamos que será positivo.