Opinión impopular: Leyendas Pokémon Arceus va a ser el juego de Pokémon más importante hasta la fecha

Antes de empezar, vamos a dejar las cosas claras. Soy un gran fan de Pokémon, pero no me consideraría un fan incondicional en ningún sentido. He jugado a todos los RPG principales e incluso a algunos de los spin-offs, pero no me importa mucho el anime ni nada del resto del universo Pokémon. No obstante, en el terreno de los videojuegos tengo una amplia experiencia a la que recurrir que, como en el caso de mucha gente, he ido acumulando desde que era muy pequeño. Por esa razón, tengo algo que decir sobre el rumbo por el que ha estado llevando Game Freak a la franquicia a lo largo de su historia. Algo positivo, pero también negativo.

¿La razón por la que hablo de todo esto? Bueno, a mediados de noviembre se lanzó el último RPG de Pokémon que mantiene la línea principal: Pokémon Diamante Brillante y Perla Reluciente, y después de trastear un poco y capturar unos cuantos monstruos de bolsillo para ir llenando la Pokédex, me he quedado con el mismo regusto agridulce de sus análisis y el que llevo teniendo desde que salieron Pokémon Blanco y Negro en 2010: ninguno de los juegos que han llegado tras esos dos han llegado a ofrecer un RPG mejor que las ediciones de Oro HeartGold y Plata SoulSilver de 2009.

Pienso, de verdad, que esa entrega de región doble que dio por concluida la Generación 4 fue el mejor RPG que ha publicado The Pokémon Company. Ahí estaba lo mejor de la región de Johto y el final era el complemento perfecto, llevándote a adentrarte de nuevo en la región de Kanto. Esta parte era casi como una aventura totalmente nueva, pero podías embarcarte en ella junto a tu poderoso equipo, todo un reto de doble dificultad en el que los entrenadores y los líderes de gimnasios podían luchar con Pokémon de niveles astronómicos. Esta apasionante aventura reinventaba Pokémon Oro, Plata y Cristal y suponía una nueva perspectiva de los RPG que, en ese momento de la historia, ya era un icono inconmensurable de la industria del videojuego.

Recordando aquellos tiempos, es verdad que a Oro HeartGold / Plata SoulSilver le faltaban esas mejoras más actuales a las que, a día de hoy, quizá no se les da demasiada importancia. El Área Silvestre en Espada y Escudo permitía capturar Pokémon de una forma nueva y con más libertad que antes, y la adición de las Megaevoluciones en X e Y dotó a los combates de aún más emoción, a pesar de que se quedó ahí. Así que hay que recalcar que Oro HeartGold y Plata SoulSilver no eran perfectos, ni mucho menos, pero si nos fijamos en cómo han cambiado los RPG de Pokémon durante la última década, por ejemplo, es difícil no ver que los últimos juegos de la Cuarta Generación fueron los mejores que ha hecho Game Freak.

Últimamente, los juegos de Pokémon se han ido volviendo más y más fáciles. No tanto en lo que respecta a los combates o la estrategia que requieren (si crees que es por eso, es posible que tenga que ver con que tu conocimiento de los juegos ha ido aumentando), sino en cómo exploramos y abordamos las mecánicas de RPG de fondo.

Hay unas cuantas mecánicas en Diamante Brillante y Perla Reluciente que delimitan la forma que tenemos de acercarnos a los RPG de Pokémon, sea por cómo funciona el Repartir Experiencia o por la guía que hay en las opciones y que te dice exactamente a dónde tienes que ir y qué tienes que hacer. Personalmente, no creo que sean malas elecciones de diseño, pero eliminar la posibilidad de que sea el jugador el que elija si lo usa o no sí que pone en juego la integridad del RPG, ya que cada vez hay menos opciones para acercarte al juego como más te guste. Y esto se aprecia especialmente en Diamante Brillante y Perla Reluciente, con muy pocas formas de encarar el juego sin hacer exactamente lo que quiere que hagas en el momento exacto en el que quiere que lo hagas, un gran paso atrás si lo comparamos con la esencia más libre de Espada y Escudo, que buscaba romper con estos límites con la incorporación del Área Silvestre y un diseño de mundo más abierto.

Pero la verdadera justificación de esta "Opinión impopular" es que, desde 2009, ha ido cambiando la forma en que jugamos y lo que nos ofrecen los videojuegos y, sin embargo, Oro HeartGold y Plata SoulSilver siguen pareciendo unos de los Pokémon más entretenidos que hemos podido ver en todo este tiempo. Fue el último juego en el que había más de una región, pero también nos dieron el Pokéwalker para poder tener una sensación más física de la aventura. Está claro que, en cuestión de dispositivos, no era precisamente revolucionario, pero era original y eso tiene su mérito.

Los RPG de Pokémon principales están tirando por lo seguro, y Diamante Brillante/Perla Reluciente son el ejemplo más evidente, aunque las señales ya llevan un tiempo ahí. He jugado a todos los RPG de Pokémon desde 2009, pero ninguno de los juegos ni sus mundos me han dejado la misma sensación de frescura que los anteriores, ni siquiera aunque crea que las novedades de Let's Go Pikachu e Eevee (que llevan a los Pokémon al mundo real y a la Poké Ball Plus) y de Espada y Escudo están yendo por buen camino.

Y es que Leyendas Pokémon: Arceus tiene un gran peso con el que cargar, como muy pocos juegos de Pokémon lo han tenido hasta ahora. Por lo anunciado, se trata de un RPG radicalmente diferente que podría indicar que estamos ante el inicio de una nueva era para Pokémon, si todo funciona bien. Si no, me temo que nos espera otra década más o menos con los mismos RPG lineales y monótonos que llevan saliendo desde que Pokémon entró por primera vez en escena en 1996. En Game Freak saben cómo crear un juego increíble en la base, pero estos RPG de cabecera podrían y deberían ser mucho mejores. Sobre todo teniendo en cuenta que Pokémon es, sin lugar a dudas, la franquicia más reconocible de Nintendo actualmente, aunque Mario y cía. defiendan a muerte su posición.

Leyendas, que busca alejarse del corsé actual de la franquicia, aboga por una mayor interacción del jugador con el mundo y sus criaturas. Coge de New Pokémon Snap el análisis del comportamiento de los monstruos de bolsillo para estudiarlos en su hábitat natural, pero no se olvida del núcleo: los combates. Siguen ahí, dando al jugador más herramientas de movimiento e interacción, modificando algunas partes del esquema de combate por turnos y movimientos, aunque esta vez en un mundo que se abre a la exploración con más libertad, y también en uno más hostil. Tanto, que hasta tu personaje puede ser atacado por los Pokémon.

Este cambio es importante, por eso Game Freak ha delegado en ILCA en los remakes y se ha centrado en Leyendas Arceus. Puede ser el comienzo de algo nuevo, aunque no se atrevan todavía a dar el salto que todos quieren. Porque, si bien Leyendas Pokémon: Arceus es más amplio, libre y ambicioso, sigue sin ser un mundo abierto. Es una muestra de que quieren explorar cambios y abrir otro camino, pero también de que todavía no se ven capaces de lanzarse a la ambición que muchos esperan de una de las franquicias más potentes de todo el mundo.

Con los enormes recursos que tiene The Pokémon Company, me resulta sorprendente que los RPG se parezcan tanto año tras año y, precisamente por eso, creo que Leyendas
Arceus podría ser el juego más importante en la historia de Pokémon. TPC no necesita arriesgarse, porque los fans seguirán comprando los juegos sean como sean los comentarios y aunque la evolución sea limitada, pero este en concreto es un riesgo que podría ser contraproducente o, más bien, podría cambiar la forma en que vemos esta serie a medida que avanza la década de 2020.

Espero, sinceramente, que cumpla su cometido, porque no sé si estoy preparado para un remake de X e Y, o de Blanco y Negro, que es lo más probable viendo lo que han vendido Diamante Reluciente/Perla Brillante. Así que pongamos nuestras esperanzas en que Game Freak y TPC puedan rematar la Generación VIII con un juego diferente a todo lo anterior, un juego que podría ser la chispa que reavive la llama de los RPG de Pokémon, que se apaga lentamente.