Roundabout: el videojuego de la limusina que se llama Rotonda

Roundabout significa 'rotonda' o 'glorieta' en español, pero también es el título de un trabajo indie de lo más estrafalario, de esos que triunfan últimamente como I am Bread (Yo soy pan), Surgeon Simulator o, por supuesto, Goat Simulator.

En realidad no es que sus niveles estén hechos únicamente a base de rotondas, sino que en esta auto-proclamada "sensación indie de la limo giratoria" vas dando vueltas sin parar, intentando controlar uno de estos larguísimos vehículos pero a base de círculos, en lo que es probablemente una parodia de los exagerados derrapes de los coches en el cine de los años 70.

De hecho, Roundabout, a la venta este viernes 20 en Xbox One, está bañado completamente por el estilo de las películas de serie B de aquella década. Los jugadores, como expandiendo la propuesta del clásico Crazy Taxi, deben recoger clientes, encontrar coleccionables o cumplir peligrosas misiones girando sin cesar en un mundo abierto que esconde algunos puzles.

Como describe el también original tráiler bajo estas líneas, el juego está ambientado en 1977 y cuenta la historia de cómo se hizo famoso Georgio Manos, probablemente el chófer giratorio más famoso del mundo (incluyendo sus momentos de gracia, de depresión e incluso sus historias de amor). En realidad, Roundabout es el apropiado nombre que tiene la ciudad ficticia donde sucede la acción.

El juego para Xbox One viene con 40 logros, vídeo 'remasterizado', compatibilidad con los nuevos gatillos del mando y otros extras. Costará 14,99 euros, mismo precio del juego de PC que se puede descargar en Steam desde el pasado septiembre. Una adaptación a PS4 de Roundabout también debería arrancar en las próximas semanas.

Curiosamente, el juego llega en la semana que cantidad de proyectos urbanísticos españoles consistentes en rotondas de lo más extravagante vuelven a estar de actualidad, ya sea por su inutilidad o por sus peculiares 'obras de arte', gracias a la recopilación del proyecto universitario NaciónRotonda.

Comparando el vídeo a continuación con algunas rotondas de España, aunque suene increíble cuesta decidir si, pese a su propuesta, el videojuego es realmente más estrambótico que esas glorietas.